Textos Rudolf Steiner

Las dos Anunciaciones de la Navidad (Espanhol)

Rudolf Steiner

(Conferencia pronunciada em Stuttgart, el 1º do Enero de 1921)

Queridos amigos:

Vamos a dedicarnos hoy a uma reflexíon que se relaciona com el Acontecimiento festivo Del ano que hace resurgir em nosotros el recuervo, la imagen tambiém el hondo sentimiento Del mistério Del gólgota.

Em la tradición Cristiana existen, em realidad, tres festividades de esta índole: la Navidad, la pascua e pentecostes. Cada una de ellas nos vincula y nos relaciona de maneradistinta com aquel Hecho en que la evolución Cristiana encuentra el sentido de todo el acontecer terrestre.

Las tres se diferencian asismismo cor respecto a las facultades anímicas del hombre: la Navidad se vincula más com el sentimiento: ES la más popular, pues su comprensión exige justamente la profundización del sentimiento, lo que la hace la más asequible para la mayoría. La Pascua exige el mayor esfuerzo de nuestro entendimiento, porque  hemos de encubrarnos a la compresión Del propio Misterio del Gólgota, entrada de una Entidad supraterrenal en la evolucíon humana y terrestre: es la fiesta que eleva el entender humano a su máximo nível y, aunque se celebre en toda la Cristiandad, nuncapodrá ser tan popular como la Navidad.

La tercera fiesta, la de Pentecostés – cincuenta días después da la Resurrección estabelece, em particular, uma relacíon entre voluntad humana y el mundo supraterrenal, al qu pertenece la Entidad del Cristo. El hombre que comprende el verdadero sentido de la fiesta de Pentecostés, asiste a la trasminión de impulsos volitivos que, a su vez, son trasmitidos al mundo.

Essas tres festividades anuales reflejan, de triple manera, lo que podríamos llamar el Misterio Crístico. Em el curso de los años, hemos considerado, desde los más diversos puntos de  vista, el Símbolo de la Navidad, y hoy recordarmos algo cuyo alcance puede apreciar todo aquel que enfoca ese Símbolo a través de los Evangelios. En ellos, se narran dos Anunciaciones del Naciento del Cristo Jesús: Una de ellas, la que reciden los Humildes pastores del campo, a los que el Angel anuncia – em sueños o cmo se quiera – el Nacimento del Cristo Jesús. Se trata ahí de la percepcíon de este Acontecimiento por médio de muy paculiares facultades anímicas de los pastores que vivíam em las carcanías del Pesebre. La outra Anunciación, narrada también em los Evangelios, es la que recibieon los Tres Reyes Magros del Oriente. Se nos dice que la captaron  a través de una estrella que lês anunció la Ilegada del Cristo Jesús.

He ahí las dos formas em que la humanidad de antaño adquiria sus conocimientos superiores, lo que ya no se enoca debidamente e em nuestro tiempo. Hoy em día, se cree que los hombres, em el fondo, han tenido desde siempre uma misma manera de pensar y percibir; que el funcionamiento de las facultades psíquicas ha sido essencialmente el mismo a través de los siglos y milênios, sólo que antaño  más primitivas.

Po nuestra ciência espiritual antroposófrica, sabemos cómo la condición anímica de la humanidade se há transformado durante el proceso evolutivo: en tiempos remotos, digamos en el séptimo  u octavo milênio postatlante, y aun antes, la humanidad concebía de una manera muy distinta a la actual, tanto la vida propia, como la esencia del mundo circundante. Esa condición anímica fue transformándose, um y outra vez, hasta llegar a nuestra actual fragmentación intelectual del mundo, y a nuestra captacíon paramente sensória. Esta evolución va, pues, desde la antigua clarividência instintiva, a través de nuestra disposición anímica del presente, paratornase, em el futuro, nuevamente em una especie de clarividência, visión del mundo que estará saturad la plena conciencia del hombre.

Em tiempos del Misterio del Gólgota, la antigua clirividencia instintiva ya había sufrido  um a modo de adormecimiento, y si bien los hombres poseían uma condición anpimica diferente a la nuestra, tampoco tenían ya la antigua clarividência, ni tampoco los antiguos procedimientos para la diferenciada captación del mundo, mediante sés tipos de sabiduría. Tanto las antiguas enseñanzas basadas em la sabiduría primordial, como la clarividência instintava, ya se habían apagado al acercarse el Misterio del Gólgota. Sin embargo, quedaban algunos restos de esa sabiduría y clarividência y, si sabemos interpretar los Evangelios, nos damos cuenta de que claramente aluden a esos restos que persistían pastores del campo, como em los tres Reyes Magos del Oriente. En los piadosos corazones de aquéllos , surgió cierto poder clarividente que lês ilumino como em sueños, em tanto que los Tres Reyes Magos, presenteados em la cumbre de la escala social, conservaban , desde antaño, la facultad de intuir, gracias a cierta sabiduría tradicional, el curso de los acontecimientos del mundo. Así, los humildes pastores pudieron observar, en  una  espécie de percepción interna, de vivencia onírica, que se lês acercaba, lo que tendría lugar em el acontecimiento del Nacimiento del Cristo Jesús. En cambio, los tres Reyes Magos del Oriente pudieron dessarrollar uma ciencia que lês permitió conocer, a través de la observación de los fenômenos sideralos, significativos sucesos terrestres que iban más Allá del curso ordinario de la vida.

He ahí dos modos de conocimiento totalmente distintos entre sí. Lo que, como último remanente de una antigua sabiduría, latia em los Tres Magos del Oriente, lês permitió descifrar el curso de las estrellas; todo esto nos remite a la antigua astronomia, a una antigua concepción de los mistério del mundo estelar, em los que se revelaban asimismo los mistérios del acontecer humano. Aquella antigua ciência estelar era algo muy distinto de la astronomia moderna. Em cierto modo, ésta también es profética, porque sabe predecir los eclipses del Sol y de la Luna, como también otros fenômenos semejantes ; no obstante, es meramente matemática y mecânica; abarca únicamente las relaciones de tiempo y espacio, en la medida en que son susceptibles de expresión matemática.

Sin embargo, la ciencia estelar antigua, la astrosofóaantigua, aunque  hiciera sus observaciones dentro del espacioy del tiempo, captaba el significado superior de la evolución, fuera de espacio y tiempo, en la vida interna humana. Em la ciencia de la antigua humanidad, esta sabiruría astrológica constituía el contenido esencial. Los hombres escudriñadan em las estrellas, lo que iba a acontecer em la Tierra; mas el mundo estelar no les era ese ser abstracto y maquinal que la humanidad  de hoy estudia, sino algo pleno de vida, y cada planeta lês brindaba la vivencia de su sustancialidad específica. Mediante um lenguaje interior del alma, dialogam, por decirlo así, com cada uno de los planetas, como hablamos hoy nuestro lenguaje común de hombre a hombre.

El ser humano tênia clara conciencia de que sus experiências internas reflejaban y reproducían lo que , en el  gran espacio externo, se realizaba em el curso de las estrellas, y esto lês conferia una  concepcíon viva y espiritualizada del Universo , en el que se sentían insertos de modo anímico-esperitual. La ciencia del Universo se estudiaba asismismo en los centros iniciáticos, em los que se preparaba a los discípulos, que manera particularmente esmerada e íntima, para que caparan y comprendieran el movimento estelar en forma tal que explicara la terrestre vida humana.

Y en qué consistían estos preparativos para la adquisición del conocimiento estelar y sus enfluencias? En educar al discípulo para que tuviera una vida anímica más despierta que la normalde los demás hombres. Téngase presente que, entonces, estaba  muy generalizada una espécie de clarividência Instintiva, que correspondía, sin embargo, a una dispisición anímica más aletargada que la nuestra actual: no era posible pensar de manera tan despierta y alerta como ho, ni desarrollar, en el mismo sentido, las matemáticas u la geometria. La vida humana, desde el nacimiento a la muerte, era más bien estado de somnolencia, pero justamente por estemismo motivo, percepción del mundo circundante en forma mucho más viva que la de nuestra actual vida consciente u despierta. Lo peculiar fue que los discípulos de los mistérios, entonces, y en realidade hasta princípios del primer milênio antes del mistério del Gólgota ( a cuyas últimas postrimérias pertenecían personas como los Tres Reyes Magos) fueron introducidos en  una ciencia muy parecida a nuestras ciencias matemáticas y geométricas.

Para la humanidad profana, fue Euclides quien introdujo la geometria, pero esto, en realidad, fue sólo divulgación de la geometria milenária, existente de los centros iniciáticos, sólo comunicada a los selectos discípulos de esas Esuelas. Em ellos,la geometria obraba de distinta manera que en los tiempos posteriores. Parece raro y paradójico, pero asíes: La geometría y las matemáticas que, hoy día, los niños aprenden en la escuela, las aprendían antaño alguns dicípulos especialmente seleccionados para ello, y admitidos, com este objeto, en los Centros Iniciáticos.

Actualmente, a menudo se afirma que en los Centros Iniciáticos se impartían enseñanzas hermétricas; sin embargo, em cuanto a su contenido puramente abstracto, no eran otra cosa que lo que hoy se imparte a los niños. En verdad, lo hermétrico no consiste en que Sean ocultas pra los geometria apelando sólo a la razón de los escolares, en nuestro tiempo actual em que el hombre con una conciencia despierta de la mañana a la noche, obviamente no es lo mismo que enseñarla a personas epecialmente seleccionadas por su conciencia más madura, en la edad en que regía la antigua clarividencia instintiva com suconciencia soñolenta. Hoy dí, no siempre existen ideas muy acertadas acerca de estas cosas.

En la literatura oriental, existe un poema dirigido a Varuna, dios de los vedas . Em este poema se dice que
Varuna es el que forcejea em todos los seres;
Veruna es el que ha extendido el aire em los bosques;.
Varuma es el que causa la velocidad em los animales cerelípedos;

Varuma es el que genera las leche  em las vacas lactíferas;

Varuna es el que suscita la voluntad en los corazones humanos•

Varuna es el que hace brillar la luz del sol en el firmamento;

Varuna es ei que suscita los ravos que refulgen en ei mar de nubes;

Varuna es el que produce la bebida “soma” en la montaña.

Encontraréis generalmente en los libros que, en realidad, los eruditos no saben qué es el jugo de “soma”, aunque haya personas que lo beben por litros y, desde cierto punto de vista, sea perfectamente conocido: el conocimiento de las Cosas es distinto segun proceda de los Misterios, o de la conciencia despierta con sentimiento profano. Asimismo, inucho se escribe sobre la Piedra filosofal, cultivada en tiempos en que se percibia de otra manera la esencia de la substancialidad;  y nuevamente, como en el caso del soma, los historiadores de ia alquimia afirman que no se conoce la Piedra filosofal. En muchas de mis conferencias, sugeri que esa Piedra es bien conocida por la mayoria de los hornbres, solo que no conocen su esencialidad, y tampoco saben por que la llaman así. La mayoría muy bien la conocen, muy bien, porque la emplean por kilos.
En estas cosas, se trata, a menudo, de algo muy distinto a lo que imagina nuestra mentalidad teórico-abstracta, ajena a la realidad y a la vida. Hoy dia, tampoco existe uma acertada intuicion de lo que significa asimilar las enseñanzas aritméticas y geométricas, a nível de madurez totalmente distinta a la disposicíon anímica de la humnidad actual. Em mi libro “El Cristianismo como hecho místico”, he explicado ya el carácter especial de los misterios; la forma de ensenãr es lo que constituía, em realidad, el “misterio”. Esto era también el verdaderio carácter de los estúdios puramente matemáticos, cuya substancia emotiva y plenamente humana, fue todavia intuída por Novalis, quien sentia las matemáticas como um gran poema, sentimento, sin Duda, no compartido por la mayoria de nuestros contemporâneos. A semejante comprension emotiva del mundo, pero concebida em formas matemáticas, se lês introdujo a los adeptos de los antiguos misterios; y todo aquel que logro vibrar vitalmente on esa comprension matemática del universo, se transformo em uma individualidad poseedora de uma vision Del mundo como la que poseian los três Reyes magos. En aquel entonces, las matemáticas celestes, tan abstractas para nosotros ahora, revelaban substancialidad, porque lo que develaban, se completaba com algo distinto, lo que salía a su encuentro. Y así, la ciência esotérica que correspondia a la antigua cultura, como ultimo remanente conservada por los Magos del Oriente, lo que se lés revelo, es el contenido de la anunciacion segun San Mateo, anunciacion basada en la cosmosofia de la ciência externa.
Por otro lado, el conocimento iniciático en forma de vivencia íntima, pudo desarollarse em personas especialmente dotadas, como lo fueron los pastores. Em su caso, lo poderes latentes em el hombre, habían de alcanzar um grado especial, que lês permitia convertir em visíon inmediata, em percepcíon instintivo-imaginativa, todo lo que sucedía em el mundo humano. Por médio de esta visíon interna, se anunció a los pastores, lo que se cifró en las palabras: “Se revela dios en las alturas; y en la Tierra paz para los hombres de buena voluntad”.
Así, los misterios cósmicos hablaban, no sólo a lo más íntimo de los humildes pastores, sino también a lo más extremo a que podia elevarse la sabiduría humana de aquel tiempo: los mistérios cósmicos hablaban a los magos de oriente.
? Cuál fue la experiência de los magos de oriente?
?Qué se desarrolló en los discípulos al introducirse en sus almas las matemáticas, al poseer especial madurez? Kant decía que los conocimientos matemáticos eran a priori, es decir, que se adquieren antes de la experiência, antes del conocimento empírico exterior; pura sabiduria verbalista, pues nada se dice con ese a pricri. Esta expresión sólo cobra sentido gracias a la Ciencia Espiritual que nos enseña que las matemáticas
emergen de nosotros mismos, ascendiendo del interior hacia la conciencia humana. ?De dónde proceden? De las vivencias humanas habidas en el mundo espiritual antes de la concepción o del nascimiento. En ese mundo vivíamos; en ese Universo vivenciábamos lo que pudi mos percibir antes de tener ojos y oídos físicos. He ahí la verdadera vida a priori, la que precedía a la vida en la Tierra. Lo que allí se vivencia a priori, surge luego inconscientemente de nuestro interior - el hombre no lo sabe - a menos que sea capaz de vivenciarlo como Novalis, en quien surgieron las vivencias prenatales, cuando trabajaba en matemáticas Para quien sepa juzgar correctamente estas verdades, el conocimiento matemátco es, de por sí, evi dencia de que él estuvo en el mundo espiritual antes de ia concepción. Para quienes esto no constituya prueba de la vida prenatal, es que no reflexionan con suficiente profundidad sobre los fenomenos de la existencia, y que no tienen idea sobre el verdadero origen de lo matemático.

Los discípuios de los Antiguos Misterios que poseían aquella especial disposción para ia sabiduría, tal como toda vía se conservaba en los Magos de Oriente, como último remanente, claramente se daban cuenta de que: “Si miramos las estrellas de modo que podamos unirlas con líneas y cálculos matemáticos, extendemos sobre la vastedad del espacio externo, todo lo que habíamos vivido antes de nuestro nacimiento”. El discípulo de los sagrados Misterios se concebía a sí mismo de tal modo que podía decirse: “Ahora vivo aquí en la Tierra; mis ojos contemplan el espacio cósmico, y observo lo que es espacial en torno mío. En estas mismas realidades espaciales, vivía yo también antes de mi nacimiento o concepción; yo mismo calculaba, entonces de estrella en estrella, lo que ahora represento, como simples reflejos, a través de las matemáticas; yo mismo, con mis poderes internos, recorría de estrella en estrella: vivía en lo que ahora tan sólo yo expreso en formas matemáticas” Y así, se les hacía presente a los hombres, todo lo que habían experimentado antes del nacimiento o de la concepción, y por esto también lo acogían en sentido sagrado, sabiendo que penetraban en el mundo espiritual em que habían vivido antes de venir a ia Tierra. Este conocimiento del mundo prenatal, se tenía como última reminiscencia en los Magos de Oriente, por él supieron del Advenimiento de la Entidad Cristo.

?De dónde venía la Entidad Cristo? Del mundo en que vivimos entre la muerte y el nuevo nacimiento, y se unió a la existencia que vivimos entre el nascimiento y la muerte, De ahí que la ciencia que se ocupa del mundo pre natal, puede revelarnos algo referente al Misterio del Gólgota. A través de esta ciencia, los Magos de Oriente recibieron el anuncio del Misterio de la Navidad.

Cuando el hombre vive en la Tierra y elabora lo que le ofrecen sus conocimientos Del mundo circundante, así co los impulsos de su acción en la vida social, experimenta algo más, inconscientemente dentro de sí mismo: aunque lo ignore, así como vive los efectos posteriores de su vida prena tal, vive también aquello que, después, llevará por las puotas de la muerte, los poderes que ya existían como germen entre el nacer y el morir y que se abrirán como una flor, en la vida postmortem. Estos poderes obraban con gran intensidad en la antigua clarividencia instintiva, y latían, como postrera reminiscencia, en los humildes pastores, gracias a su gran y especial piedad.

En esos poderes vivimos especialmente durante el suño, es decir, cuando nuestra alma ya esta fuera dei cuerpo vive en el espacio exterior, cuando vive inconscientemente de una manera que sólo volverá a conocer conscientemente, cuando deje el cuerpo físico después de la muerte.

Estos poderes que, en estados especiales, pueden in troducirse en la vigilia desde el mundo del sueño y de los ensueños, fueron sumamente intensos en la antigua clarividecia instintiva. Los experimentaron los humildes pastores y através suyo, suyo, se les reveló el Misterio del Gólgota, el mi mo que también fue anunciado a los Reyes Magos, mediante otra experiencia distinta, como hemos visto.

Ahora bien, ?qué es lo que experimenta el hombre cuando los poderes que posee particularmente entre la muerte y el nuevo nacimiento, se estimulan durante la vida terrenal, como fue en el caso de los Reyes Magos? Se informa de lo que acontece fuera de lo terrestre; se traslada de la Tierra al mundo sideral en que moramos entre la muerte y el nuevo nacimiento, el mundo en el que se introdujeron los Magos de Oriente, en su ruta de la Tierra al espacio celeste.

lan lo que sucede en el interior de la Tierra, fuerzas telúricas especialmente, que poseemos gracias a nuestro cuerpo. Preferentemente, actúan en lo que experimentamos entre el dormirnos y el despertar, cuando nos encontramos en el mundo exterior a nosotros, preferentemente en el mundo externo que pertenece a la Tierra.

Quizá les parezca que existe una contradicción ante la verdad de que estamos fuera de nuestro cuerpo, pero no hay tal: siempre percibimos sólo lo que está fuera de nosotros; nunca lo en que vivimos. La realidad es: entre el dormimos y el despertar, y mirar hacia atrás, de cierta manera intuimos nuestro cuerpo como retrospección; sentimos, pues, aquello por medio de lo cual se relaciona nuestro cuerpo con lo terrenal, precisamente, porque él es de la Tierra. Los humildes pastores sintieron, en realidad, la manifestación de la Tierra que procedia de su cuerpo, y, en estado onírico, intuyeron como la voz del Angel, lo que acontecía. He ahí pues, el segundo cariz. O sea, la verdad llegó a los Reyes Magos, por la ciencia celeste, y a los pastores, por revelación terrenal.

El que la revelación se hubiera manifestado desde dos lados distintos, corresponde exactamente al Misterio del Gólgota: a la Tierra llegó una Entidad celestial, que anteriormente no había pertenecido a ella. La sabduría celeste nos revela, pues, que Algo descendó de los cielos; la sabiduría de los pastores, a su vez, nos lleva a Conocer la Tierra: nos adentramos en su tejer y en el vivir que percibe la llegada de la Entidad celestial. Es la misma Anunciación, recibida de ambos lados; de maravillosa manera, el Acontecimiento Unico se anuncó a la humanidad de dos maneras.

Y si ahora observamos cómo recibió la humanidad el Acontecirniento del Gólgota, nos damos cuenta de que, en uno y otro aspecto, no se conservaban sino remanentes de la antigua sabiduría. Ya he señalado cómo, por estos remanentes de la sabiduría primitiva, de cierta gnosis, se intuía el Misterio del Gólgota en los primeros siglos de nuestra era. Después, se quiso penetrar en este mismo Acontecimiento con el puro análisis intelectual y en el siglo XIX, el naturalismo empezó a apoderarse de este campo de entendimiento: ya nada quedaba del contenido suprasensible Del Acontecimiento del Gólgota. Al Cristo, se le concebía sólo como el “sabio hombre de Nazaret”, de cuño naturalista: es necesaria, pues, una nueva comprensión espiritual del Misterio del Gólgota. No confundamos el Hecho con la concepción que de este Hecho tienen los hombres.

La disposición anímica propia de los pastores, así como la de los Reyes Magos, todavía existía como últimos remanentes cuando se produjo o el misterio del Golgota. Pero todo esto ha cambiado en la evolución de la hunianidad, pues todo cambia y se metamorfosea.

? Qué se ha hecho de la sabiduría de los ‘Reyes magos; Nuestras matemáticas con su astronomia! Los Reyes magos poseían un saber Supraterrenal, grandiosa recordación de la vida prenatal. Hoy día, ese saber se ha encogido, ha perdido su fuerza, convirtiéndose en nuestra interpretación mecanico-matemática del cielo que ya no aplica a los fenómenos exteriores más que las leyes de la matemática y de la mecanica. Lo que surge en nuestro interior al contemplar lo que nos ha quedado como astronomía matemática, es la metamorfosis moderna de la sabiduría de los Reyes Magos.

En cambio, nuestro saber exterior sensible, es decir, la mera percepción visual, auditiva, etc., corresponde a la externaljzación del saber interior de los pastores. Los secretos íntimos de la existencia terrestre que se les revelaron, se nos han convertido en la fría observación cientifíco-natural del mundo exterior.

Esta observación científico-natural es engendro de la sabiduría de los pastores; sólo que en absoluto parecido a la madre, en tanto que nuestra matemática, convertida en astronomía, es resultado de la sabiduría de los Reyes Magos. He ahí la evolución necesaria para la humanidad. Cuando nuestros hombres de ciencia se encuentran en los laboratorios o en las clínicas, ya no tienen mucho en común con los pastores, pero sus secas investigaciones es metarnorfosis directa de su sabiduría. Asimismo, nuestros matemáticos son los directos herederos de los Reyes Magos de Oriente: lo exterior se interiorizó; y lo interior se extenionizó; con esto, nos hemos alejado realmente de la comprensión del Misterio del Gólgota; mucho, efectivamente, de ella; y quizá sean los que se llaman, oficialmente, predicadores y exponentes del Cristianismo, quienes a mayor distancia se hallan.

Por medio de los poderes cognoscitivos, emotivos y de creencia, latentes hoy en el hombre, ya no se puede calar la verdadera esencia del Acontecimiento del Gólgota.
?Cómo encontrar un nuevo acceso? La sabidunía de los Reyes Magos se ha convertido en seca matemática, a través de cuyas imágenes se contempla solamente el cielo: se ha convertido en simple facultad interior, y esto ha de revitalizarse, para volver a edificar desde lo interno, lo externo.

Tratemos ahora de comprender, desde este punto de vista, el contenido de mi libro “La Ciencia Oculta”. Los Reyes Magos tenían la visión de los mundos siderales, y en ellos, percibían lo espiritual, porque podían intuir la vivencia humana prenatal.Todo esto se convirtió en abstracción en nuestras matemáticas. Pero los mismos poderes que ellas desarrollan pueden revivificarse e intensificar se en la videncia imaginativa y entonces nace, de. nuestro interior, un mundo que, aunque creado interiormente, se nos aparece como externo, representado por Saturno, Sol, Luna, Tierra, Júlpiter, Venus, Vulcano. Vemos el cielo a través de la percepción interior, así como los Reyes Magos percibían los enigmas del Misterio dei Gólgota a través de la observación externa; lo exterior se convirtió en interior y llegó hasta la abstracción matemática: lo interior ha de transfomarse ampliándose en Universo exterior, nueva videncia interior que nos conducirá hacia una nueva astronomía, la astronomia que se experimenta en la intimidad del ser.

Sólo con semejante nuetra comprensión del Cristo, dotamos de dierto sentido la Fiesta de la Navidad. Para la mayoría, ya carece de especial sentido.

Hay una linda costumbre que apenas data de fines dei siglo XVIII: tomar el árbol de Navidad como símbolo de la fiesta de Nayidad. Este árbol no se difundió hasta el siglo XIX. Y ?qué ES él en realidad? Ei árbol de Navidad se originó de la ramita que el criado de San Nicolás traía en su brazo el 6 de Diciembre; la historia de ese árbl nos lleva a descubrir que, en realidad, tiene que ver con el árbol del Paraíso: la conciencia humana vulve al árbol del Paraíso, vuelve a Adán y Eva. ?Qué significa todo esto? Es uno de los aspectos de cómo vuelve a anunciarse el Misterio del Gólgota en nuestro tiempo.

Del Misterio dei Gólgota, se retrocede al comienzo de la Creación del mundo y, por no comprender el sentido de la Redención del mundo, vuelve uno a dirigirse hacia el Dios creador del mundo. Esto encuentra su expresión en el hecho de que, poco a poco, se va perdiendo el verdadero símbolo navideño el símbolo del pesebre que jugaba tan importante papel, todavía en los autos sacramentales navideños de los siglos pasados. En su lugar, ha surgido el árbol de Navidad, realmente el árbol del Paraíso. Y vemos aquí cómo la antigua religión de Jahvé ha vuelto a ocupar el lugar de la religión de Cristo: el árbol de Navidad es el símbolo de este resurgir en forma múltiple, de la antigua religión de Jahvé.

Jahvé fue venerado con justa razón, en su tiempo, como Unico, cuando su pueblo se creia único y no veia lo que existia más allá de sus límites, en la expectat iva de extender-se, un día, sobre toda la Tierra.

En nuestro tiempo, se habia del Cristo Jesús y se venera solamente a Jahvé, pues en las distintas naciones esto lo hemos visto en la Guerra - se hablaba del Cristo, pero no era sino el Dios Primordial, Jahvé, que vive en la Naturaleza y en las fueyzas de la herencia. Tenemos, pues, el árbol de Navidad por un lado; por el otro, los dioses nacionales que no alcanzan la substancia crística. Con todo esto, los hombres retrocedieron, no captaron el Misterio dei Gólgota, y se agarraron a un tiempo mucho más antiguo.

En la insistencia sobre el principio de las nacionalidades, en ia proclajnación de que los distintos pueblos siguen a sus respectivos dioses, se nota un retroceso hacia la religión de .Jahvé. Los que oran al Cristo invocando algún nacionalismo, son los que, en realidad, más Le reniegan

Hay que tener en cuenta que, en las dos Anunciaciones, tanto en la de los pastores, como en la de los Reyes Magos, existe un humanismo omniabarcante puesto que la Tierra es una misma para todos los hombres. Al recibir los pastores la Anunciación de la Tierra, recibieron, con ella, algo que no se distingue, que no se diferencia según la nacionalidad. Y al recibir los Reyes Magos la magna Anunciación de los cielos, del sol, con ella recibieron también un elemento humano universal; pues el sol, habiendo primero brillado en el territorio de un pueblo, va pasando luego a brillar en el de otro. El cielo es común a todos, así como también lo es la Tierra. Lo humano universal despunta en la humanidad, gracias al hecho que se patentiza también en el relato navideño sinbolizado por la doble Anunciación. Todo esto, plenamente comprensible para la disposición anímica de otros tiempos, vuelve a serlo hoy, gracias a la Ciencia del Espíritu.

Y ?como se trata a esta Ciericia del Espíritu? Los que se llaman representantes oficiales del Cristianismo, tienen un modo muy particular de trataria. muchos de ustedes han visto en Dornach el grupo tallado, con la figura de Cristo en el centro, destinado a ocupar el ala Este del Goetheanum. Saben ustedes también que yo, de guía, explico esta figura del Cristo, diciendo que muestra un ideal rostro humano, tal como veo en el verdadero semblante del Cristo. Lo que han visto la estatua, recordarán que ese rostro idealizado, es puramente humano. En los prime ros tiempos en que se exhibía, sólo se veía un trozo de madera en la parte inferior, esa parte que habrá de expresar, sobre todo, la voluntad que se manifiesta eu el caminar.  Em la superior, la figura se halla rodeada de dos configuraciones luciféricas aisladas de la del Cristo, y abajo dos ahrimánicas. Existe cierto predicador misionero, un tal Frohnmeyer, que publicó un opúsculo sobre Teosofía, en el que también superficialmente se ocupa de la Antroposofía. AhÍ se puede leer - no como si lo supiera por otros, sino como si lo hubiese visto personalmente - lo siguiente: jen Dornach, van a colocar a un Cristo, cuya parte superior tiene rasgos luciféricos, y la inferior características animales!

He oído a menudo hablar de un método para conocer la disposición anímica de una persona que llega tarde a su casa; va a la cama y deja su sombrero sobre ella. Si despúes no ve más que uno, está sobria; pero si ve dos, está decididamente ebria. Ahora bien, quien ve la figura del Cristo en Dornach, arriba con rasgos luciféricos y abajo con características animales, ciertamente se encuentra en el mismo estado del hombre que ve dos sombreros cuando deja uno sobre la cama.

Este asunto es, en realidad, muy grave, porque el opúsculo lo escribió un misionero cristiano, y en él figuran otras afirmaciones con el mismo grado de veracidad. Este misionero fue nombrado, hace poco, Doctor en Teología por una Facultad Teológica donde él actúa como docente. Podéis imaginar qué grado de verdad tendrá la enseñanza de un hombre que de ella carece, como lo hemos constatado, al falsear lo que describe, afirmando haberlo visto.

Esta es la veracidad de los que pretenden representar oficialmente el Cristianismo. Yo les pregunto: ?no sonesos representantes cristianos, - en realidad, anticristianos, por su mentalidad mentirosa e insicera - la viviente prueba de que el Cristianismo exige una renovación? Quizá sea por esto que tengamos enemigos tan acérrimos entre esa gente, porque así se pone en evidencia qué clase de cristianos san. Naturalmente, no les interesa esa evidencia; quieren seguir pescando en aguas revueltas, propagar sus calumnias y mentiras, y aparecer como las lumbreras del Cristianismo.

Cuando pensamos en el Misterio de la Navidad, deberíamos grabar en nuestros corazones, el que hemos de dirigir efectivamente nuestra mirada hacia un Nacimiento; no parlotear acerca de la fiesta navideña y de nues-tros sentimientos; mirar, en su lugar, lo que ha de renacer en nuestro tiempo.
En verdad El Cristianismo fiesta navideña universal, y la Ciencia Espiritual es la que aspira a preparar correctamente entre los hombres, esa universal fiesta mavidenã.

Traducción de Paula Eppenstein,
cotejada por M. Solá y J. Berlín.

CANTOS ESPERITUALES.

Aclara hacia ei Este ei horizonte
y los tiempos oscuros reverdecen.
Hondos tragos bebemos
con avidez en la irisada fuente:
dwce amor transfigurado eu dios,
santo don a nuestro anhelo antiguo.
El niño que loe cielos santifican
desciede por fin sobre la tierra;
alentando en el canto, un viento do vida
sopla otra vez eu torno del mundo,
y junta las chispas ha tiempo disspersas
y enciende de llamas fanales eternos.

Surge de lãs tumbas
nueve vida y sangre nueva.
En el río de la vida se sumerge
para darnos paz eterna
e irguiéndose entre nos a manos llenas
acoge amoroso nuestros ruegos.

Deja que Su Dulce mirada
penetre hasta el fondo de tu alma,
Ja eterna beatitud
Invadirá tu ser;
corazones, espíritus, sentidos
sus danzas otra vez renovarán.
Tómalo, confiado, de la mano
y guarda su faz en la memoria,
pues siempre vOlverás a él
como flor hacia la luz solar,
y será para ti una esposa fiel
si le entregas entero el corazón.

El Señor que nos fuera tan temido
es ahora como uno de los nuestros.
De norte a sur se multiplican
Despertando, los germenes celestes.
Déjanos que fleles esperemos